Instalado el tapiz de las fallas 2022

Diseñado por Juan Dualde e inspirado en la antigua ciudad amurallada de Borriana

El tapiz ya finalizado se ha cubierto con un plástico para evitar posibles desperfectos ante la previsión de lluvias


 Burriana ya luce el tradicional tapiz de Fallas en la plaza Mayor. El Ayuntamiento ha completado este viernes la instalación de la obra en honor a la Virgen de la Misericòrdia en la fachada de la basílica de El Salvador, el lugar donde culminará la ofrenda del colectivo fallero el próximo sábado 19 de marzo.

En esta ocasión, como han explicado la concejala de Fallas y presidenta de la Junta Local Fallera, Sara Molina, y el presidente de a Federació de Falles, Salvador Doménech, “el magnífico tapiz diseñado por el artista Juan Dualde está inspirado en la antigua ciudad amurallada de Borriana”, y han precisado que se ha optado por cubrir con un plástico el “valioso trabajo artesanal” para evitar desperfectos ante la previsión de lluvias para estos días.

El personal de Vía Pública ha trabajado durante esta semana en la colocación de la estructura para poder izar esta mañana la imagen alegórica diseñada por el artista Juan Dualde, autor de 32 tapices a lo largo de su carrera, que de nuevo ha sido confeccionada mediante la tradicional técnica del papel de seda.

El tapiz, con la patrona de la ciudad como protagonista, tiene unas medidas de 9 metros de altura y 7 de anchura, y presidirá los actos de la entrega de premios de las fallas el día 16 por la tarde y la ofrenda el día de Sant Josep.

El tapiz es una tradición que se remonta al año 1960, a propuesta de Ramón Boix, presidente entonces de Junta Local Fallera, con la idea de crear un ambiente más espectacular para el acto de la ofrenda de flores que se venía realizando en el interior de la iglesia de San José, en los Carmelitas.

El primer encargo recayó en el artista Joaquín Ortells, cuyo tapiz sería instalado en la fachada lateral de los Carmelitas. Las dimensiones y la línea temática de aquel primer tapiz han marcado a todos los posteriores, con la imagen de la patrona de la ciudad como imagen central y receptora a partir de aquel momento de las ofrendas florales de toda la comunidad fallera.

Al año siguiente, en 1961, ante el éxito de la iniciativa, el tapiz fue instalado en la fachada de la entonces iglesia de El Salvador, donde se ha emplazado hasta la actualidad.