El concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Borriana, Bruno Arnandis, ha explicado este mismo jueves «la opción que vemos de utilizar la fórmula de «gestión directa» para el desarrollo de la Unidad de Ejecución A13-34, correspondiente a las zonas del Camí Fondo y el Camí de Ribesalbes, ya que los últimos cambios implementados en la Ley de Ordenación del Territorio, Urbanismo y Paisaje de la Comunitat Valenciana, hacen que tanto los costes para las arcas públicas como los tiempos se reduzcan considerablemente, así que ya estamos estudiando a fondo esta posibilidad». Según el mismo Arnandis, que ha querido hacer un pequeño repaso a la situación de los últimos años de la Unidad de Ejecución A 13-34 «ya en 2012 se iniciaron los primeros trámites y se realiza la adjudicación de una unidad que afecta a suelo, que podemos decir que está muy consolidado, un momento en el cual la división entre propietarios que desean su ejecución y los que no es más que evidente, por lo que presentaron toda una serie de alegaciones que todo hacía indicar que paralizarían por completo la ejecución, así que la solución que vimos más razonable fue la de negociación con la empresa a la que en su momento se adjudicó el proyecto». Así, tras esas reuniones con la empresa, la sol·licitud final fue de «una reclamación que la empresa tasó en 158.000 euros, cifra que conseguimos reducir hasta menos de la mitad, en un proceso que terminaba hace unos meses con un mutuo acuerdo a través del cual la empresa nos hacía llegar todos los proyectos de urbanización». Por tanto, y como ha querido dejar claro Arnandis «los recientes cambios en la LOTUP facilitan bastante la posibilidad de que sean los propios Ayuntamiento quienes se encarguen de la gestión directa de la urbanización, ya que tan sólo se obliga a consignar un cinco por ciento en el presupuesto, lo que rondaría los 77.000 euros y facilitaría en gran medida que aquellos proyectos de desarrollo que dificilmente se podrían realizar con el modelos de gestión indirecta utilizado hasta ahora, y que además se encuentran enquistados por haberse anulado por sentencia, como en el caso de la A. 24-25-26, o por resolución con el urbanizador como en la B2». Así, el área de Urbanismo ya se ha puesto manos a la obra para iniciar toda la tramitación, y como ha aclarado el mismo Arnandis, «para ponerlo todo en marcha hay que valorar desde los servicios técnicos municipales aspectos como la cantidad de dinero a consignar en el presupuesto cuando se pueda realizar la modificación de crédito, las modificaciones de los proyectos para adaptarlos a la nueva normativa, además de la posibilidad de dividir y ejecutar las dos unidades por separado, ya que facilitaría bastante el proceso».

Así, Arnandis ha concluido que «las facilidades que la LOTUP nos ofrece a la hora de ejecutar de forma directa la gestión, hay que aprovecharlas, aunque siempre teniendo en cuenta que también realizaremos reuniones con los y las propietarias de la zona antes de iniciar cualquier proceso de ejecución, al igual que en otras unidades en las que la LOTUP ha facilitado los pasos a dar, y en las que siempre hablaremos primero con las personas afectadas antes de comenzar a tramitar esa gestión directa».